La oración

 

LA ORACIÓN:

Las categorías formales y funcionales de la oración.

 

Categoría formal

Está representada por cada una de las partes de la oracion (Sustantivo, adjetivo, verbo, adverbio, conjuncion, preposicion, pronombre):

 

Sustantivo: Los sustantivos son palabras cuyos referentes son clases de entidades fijas, no estados de hechos o relaciones gramaticales.

Adjetivo: El adjetivo es una parte de la oración o una clase de palabra que complementa a un sustantivo para calificarlo; expresa características o propiedades atribuidas a un sustantivo, ya sean concretas o abstractas.

Verbo: El verbo es la parte de la oración o categoría léxica que expresa una acción, movimiento, existencia, consecución, condición o estado del sujeto

Adverbio: Un adverbio es una parte de la oración que complementa a un verbo, un adjetivo, otros adverbios e incluso oraciones.

Conjunción: Una conjunción es una palabra o conjunto de ellas que enlaza proposiciones, sintagmas o palabras. Constituye una de las clases de nexos.

Preposición: Palabra invariable que se utiliza para establecer una relación de dependencia entre dos o más palabras.

Pronombre: Los pronombres son palabras o morfemas cuyo referente no es fijo, sino que se determina en relación con otras que normalmente ya se han nombrado.

 

Categoría funcional

Una categoría funcional es una palabra, o bien un morfema, que no desempeña dentro de la oración una función de tipo léxico o semántico, sino únicamente gramatical. Al contrario que las categorías léxicas, con las que contrastan directamente, las categorías funcionales carecen de un referente, lo que hace que su contenido semántico sea abstracto.

Las categorías funcionales de una determinada lengua componen siempre un grupo cerrado de palabras, no ampliable excepto por la lenta evolución diacrónica de la lengua en cuestión. Para entender bien esta realidad, hemos de considerar el modo en que se crean, normalmente, las nuevas palabras. Éstas casi siempre responden a la necesidad de las comunidades de dar nombre a nuevos fenómenos, objetos, ideas o conceptos, de forma que dichas palabras nacen arraigadas a una determinada carga semántica. Es decir, nacen ya con un referente, siendo elementos léxicos. Las palabras que no cargan con un significado concreto son en cambio suficientes por si mismas; sólo pequeñas y extremadamente infrecuentes innovaciones pueden alterar el conjunto cerrado de los elementos no-léxicos de una lengua.

La oración por su estructura: Simples y compuestas: bimembres y unimembres.

Oración simple: Las oraciones simples son aquellas que poseen un único verbo conjugado, y que por ende poseen una estructura generalmente llana y directa: un sujeto, dotado o no de complementos, y un predicado, cuyo verbo a su vez puede tener o no complementos. Se distinguen de las oraciones compuestas, dotadas de más de un verbo conjugado y poseedoras de estructuras más complicadas.

Oración Compuesta: Se denomina oración compuesta o compleja a una oración que tiene más de un sintagma verbal o, dicho de otro modo, tiene más de un verbo conjugado. Es una cualidad sintáctica formada por dos o más oraciones simples que se han combinado entre sí mediante parataxis o hipotaxis.

Oración Bimembre: Las oraciones bimembres son aquellas que expresan un sentido completo, a lo largo de una estructura oracional divisible en dos sintagmas o apartados: el sujeto (quien realiza la acción) y el predicado (la acción realizada). De allí su nombre de bimembres, pues poseen dos miembros identificables.

Oración Unimembre: Las oraciones unimembres son aquellas que tienen un único miembro. Por este motivo no pueden ser divididas en sujeto y predicado, debido a que cuentan con un solo elemento sintáctico. Por ejemplo: “Está lloviendo”, “¡Qué bien!”, “Buenas tardes”, “Prohibido fumar”.

4.4 La oración por la actitud del hablante.

Según la actitud del hablante las oraciones se clasifican en:

Enunciativas: expresan la oración como real y objetiva. Esta modalidad es propia de la función representativa del lenguaje y su modo verbal es el indicativo. Ej: No he llegado a tiempo y me han cerrado la puerta.

 

Interrogativas: sirven para formular preguntas. Corresponden a la función apelativa del lenguaje. Pueden ser totales (preguntan por la totalidad del enunciado) o parciales (preguntan por algún elemento de la oración que el hablante desconoce, mediante pronombres, determinantes o adverbios interrogativos). Ej: ¿Tienes hermanos?

 

 

Exclamativas: expresan una mayor implicación afectiva del emisor en aquello que dice. Su entonación es enfática y fácilmente reconocible. Esta modalidad se corresponde con la función expresiva del lenguaje, y en la escritura la marcamos con los signos de exclamación. Ej: ¡Pero qué tarde vienes! ¡Ya nos han cerrado la puerta!

 

Exhortativas: las utilizamos cuando ordenamos, pedimos, prohibimos o animamos. Es la modalidad de la función apelativa o conativa del lenguaje. Exigen una respuesta no verbal del interlocutor, lo que queremos es que haga algo, no que nos responda. Su modo verbal es el imperativo en las afirmativas y el subjuntivo en las negativas. Ej; Ven aquí ahora mismo.

 

Desiderativas u Optativas: expresan deseo. Llevan el verbo en subjuntivo y complementos oracionales (ojalá, así, que). Suelen tener entonación exclamativa. Ej: ¡Ojalá hubiera viajado más cuando era joven!

 

Dubitativas: sirven para expresar duda o posibilidad. Por eso, su modo verbal es el subjuntivo, aunque puede aparecer el indicativo, porque son muchos los recursos de que dispone el castellano para manifestar esta modalidad (complementos oracionales, futuro de indicativo, condicional, perífrasis verbales). Ej: Puede que vaya al cine esta tarde.

 

La oración por la naturaleza del verbo.

Copulativas: son oraciones copulativas las que tienen predicado nominal.

Estas oraciones se construyen con los verbos ser, estar y parecer y un complemento atributo.

Las oraciones copulativas pueden llevar, además del atributo, un complemento circunstancial, pero ningún otro complemento verbal.

 

Predicativas: son oraciones predicativas las que tienen predicado verbal, que es el que se construye con verbos no copulativos.

Las oraciones predicativas pueden llevar cualquier tipo de complemento verbal, salvo el atributo:

 

Transitivas: Se construyen con verbos como: comprar, comer, escribir, pintar, decir, mirar, etcétera. Estos verbos admiten la construcción transitiva y la intransitiva, pero es más frecuente la primera.

Intransitivas: Se construyen con verbos que admiten o no objeto directo, sin embargo algunos de estos verbos, habitualmente intransitivos, como vivir, dormir o llorar, a veces pueden llevar objeto directo y formar oraciones transitivas:

 

Pasivas: Las oraciones cuyo sujeto no realiza la acción verbal, sino que la recibe o la sufre; por esta razón se le llama sujeto paciente. En estas oraciones, la acción verbal es realizada por el agente, que va introducido por la preposición por

4.6 Producción.

Una forma de estudiar la producción de oraciones consiste en estudiar los errores que se cometen al hablar. Garrett (1984) ha estudiado los tipos de errores más frecuentes que se producen espontáneamente en el lenguaje natural y a la vista de estos errores ha propuesto un modelo de producción del lenguaje.

Según este modelo, existen cinco niveles de representación implicados en la producción de oraciones. Estos cinco niveles se dan en un orden:

 

Nivel del mensaje: se trata de un nivel en el que el hablante especifíca los conceptos de los que va a hablar.

Nivel funcional: Se trata de un esbozo de la estructura gramatical de la oración que se intenta pronunciar. En este esbozo se tiene en cuenta los lugares donde irán colocadas las distintas formas gramaticales, pero todavía no se cuenta con las palabras reales que van a ocupar esos huecos.

Nivel posicional: En este nivel las palabras reales que se van a utilizar se seleccionan del léxico y se incorporan a los huecos que estaban destinados para ellas en el nivel anterior.

Nivel fonético: Se especifican las formas fonéticas de las palabras.

Nivel articulatorio: En él se especifican una serie de instrucciones sobre las ordenes motoras necesarias para articular las palabras que componen la frase.

 

Adquisición lexical.

El Proceso de adquisición lexical se refiere a la forma en que se obtiene el conjunto de palabras o vocabulario que permite una mejor comunicación entre los hablantes o quienes escriben. Las características de este proceso son:

Realizar actividades rutinarias que permitan conocer o escuchar palabras en diversos temas, por ejemplo, leer libros de todo tipo de materias, escuchar noticias, usar frecuentemente el diccionario.

Anotar palabras con significado desconocido para identificar su utilización en el contexto, además de conocer su uso gramatical.

Identificar el campo semántico de las palabras desconocidas y terminologías afines (sinónimos).

Identificar además de los sinónimos, los antónimos. Es decir, palabras que significan lo contrario.

Redactar oraciones para incorporar los nuevos términos al léxico.

 


LUIS ANDRÉS ARIZA CEDEÑO 21-SISN-2-012

 

 

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